martes, 19 de julio de 2016

si no menstruo acaso no soy mujer?

Desde que me convertí en adolescente o incluso un poco antes ya escuchaba a la gente decir: “le llegó la regla, ya se convirtió en mujer” y así en mis sueños inocentes esperaba ese gran momento, momento que nunca llegó entonces… ¿en qué momento me convertí en mujer? ¿Acaso por no menstruar no soy mujer? Me miro al espejo y me veo como cualquier mujer, y me surge la interrogante: ¿Cuándo me convertí en mujer si nunca he menstruado? Y eso me lleva a comprender que como mujeres rokitansky tenemos etapas o procesos distintos. Que tengo que asumir eso porque si trato de compararme con el resto sufriré toda la vida y solo perderé el tiempo. Así que pienso que nos hacemos mujeres cuando nos SENTIMOS MUJERES,  cuando nos miramos al espejo y vemos que nos aparecieron pechos, se nos ensancharon las caderas y queremos vernos lindas para los hombres después que pasamos años sin querer jugar, hablar, etc, con ellos. No podemos decir un momento exacto, al igual que cuando pasan los años y maduramos, siempre he pensado que la gente común madura a la fuerza, hoy en día hay muy pocas mujeres que se embarazan porque “se pusieron en campaña”, es decir, porque programaron o planearon tener un bebe en ese momento porque se sentían preparadas, pero no, la mayoría se embaraza porque no se cuidaron, porque sacaron mal la cuenta o se les olvidó tomarse la pastilla. Y es en ese momento en que tienen que madurar porque tienen que hacerse cargo de un ser indefenso que solo depende de ellas, así sin darse cuenta sus prioridades, su forma de pensar y su tiempo cambian de un día para otro. Nadie les preguntó si querían madurar, ni ellas decidieron madurar porque era el momento. ¿Pero qué pasa con nosotras?, si no tenemos ese motivo para madurar.
A los 23 años, cuando me dieron el diagnóstico asertivo y me dijeron sin ética ni cuidado que no tengo útero y tampoco tenía vagina, tuve que asumir realmente que yo siempre tendría otra realidad y veía a mis amigas y amigos comenzar a ser familia y a cambiar su forma de ser. Mientras yo seguía igual, esas amistades se alejaron de mí y yo de ellas, porque ya no compartíamos los mismos intereses y los hijos les hicieron cambiar y madurar.
Tengo 30 años y hoy puedo decir que estoy madura, lo siento porque puedo hablar ciertos temas sin tapujos, me hago cargo de mis errores y me tengo que sustentar por mis propios medios y actúo pensando en las consecuencias. Trato de encontrar el momento en que maduré pero me cuesta, quizás fue en el momento en que caí en depresión y me encontré con mi misma hace un par de años, quizás tenemos que pasar por alguna situación dolorosa para poder madurar y crecer. Tal vez el emparejarme con un hombre que ya estaba maduro me ayudó, no lo sé, sólo sé que no fue a la fuerza como muchas de mis amigas. Y me vuelvo a preguntar, ¿eso está bien? y luego digo, ¿y qué importa? Basta de querer ser como el resto, si soy feliz así genial!!! Los demás que sigan tratando de verse felices en el sistema en que están inmersos.

2 comentarios:

  1. Toda la razón Rosita, en esos momentos uno no sabe que hacer. hace poco asiste a uno, y los cometarios fuera de lugar para mi me hicieron sentir más que un bicho extraño. Y pronto se hará el de mi concuñada en casa de mi suegra "donde vivo" 😢.

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  2. Cuando es d alguien no tan cercano puedes excluirse pero cuando es d alguien d la familia es difícil escapar d eso...Y la familia jamás comprenderá que es un tema q t afecta, saludos esperanza!!!

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